Después de abrir su gira con tres Movistar Arena agotados en septiembre y de continuar la gira por Uruguay y México, Cazzu regresó a Buenos Aires para cerrar, este domingo 2, el primer tramo de Latinaje en el mismo escenario donde lo presentó por primera vez. La artista jujeña volvió a colmar el estadio —su cuarta función agotada— y anunció una nueva fecha para el 28 de febrero, en el marco de su recorrido latinoamericano.
“Latinaje es un abrazo a todas las identidades. Feliz orgullo”, saludó Cazzu en escena al colectivo LGBT. El recital abrió a las 21 en punto con “Ódiame” y siguió con “Sobre mi tumba”, “Me tocó perder» —con un pasaje de malambo que levantó la primera gran ovación— y “Piénsame”. Luego sonaron “Mala Suerte”, “Dolce”, “Engreído”, “Jefa”, “Nena Trampa”, “Brinca”, “Mucha Data” y “Miedo”, además de una sección folklórica con la zamba “Jujuy Mujer” y “Pobrecito mi patrón”. También interpretó “Inti” y presentó por primera vez en Argentina su nuevo single, “Balada Malvada”.


Latinaje marca un giro en su carrera: un proyecto escrito íntegramente por ella, producido por Nico Cotton y grabado con orquestas en distintos países de la región. En vivo, la premisa del “viaje sonoro” se sostiene con una formación musical de alto nivel —con cuerdas, vientos, percusión, teclado y bandoneón— y un repertorio que transita tango, chacarera, salsa, corrido tumbado, merengue, bolero y el reggaetón, infaltable, con la mujer en el centro del relato.
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Los músicos que la acompañaron fueron Joaquín Guevara (guitarras), Patricio Resico (bajo), Martín Aguilar (teclado), Rodrigo Húmeres (batería), Matías Gorordo y Cristian Canatelli (percusión), Nicolás Enrich (bandoneón), Bruno Cavallaro y Matías Romero (violines), Clement Silly (violonchelo), Lucas Giré (trompeta/flugel), Rómulo Herrera (saxo/flauta) y Miguel Cedeño (trombón).
La puesta se dividió en cuatro actos, con 14 músicos, cuatro bailarines y cambios de vestuario y escenografía que acompañaron el recorrido musical. La dirección musical, a cargo de Juan Giménez Kuj y Joaquín Guevara, sostuvo un show que cerró entre salsa, cumbia y cuarteto; e incluyó el cover de “Con la misma moneda” —que presentó destacando a Karina como “una mujer con los ovarios bien puestos”— y continuó con “Con otra” (guiño a su presente personal) y “Menú de degustación”.


El tercer acto tuvo una carga más emotiva. Cazzu interpretó “Jujuy Mujer” de Los Changos y luego “Pobrecito mi patrón”, en un homenaje a Facundo Cabral, a quien definió como “un gran hombre” y cuya obra consideró necesario “volver a escuchar”. También cantó «Inti«, dedicada a su hija: “Se la dedico a las madres y padres presentes”, señaló. El momento más conmovedor llegó con “La Cueva”: apenas sonaron los primeros acordes, miles de globos rojos organizados por fans encendieron el estadio. Entre lágrimas, la artista agradeció el gesto y resumió: “Son mi mejor San Valentín”.

Durante la noche, agradeció a su equipo técnico —todas mujeres—, a los músicos y a su productor, subrayando la dimensión colectiva del proyecto.
Julieta «Cazzu» Cazzuchelli transita una etapa personal y artística que no oculta y que también llevó a los escenarios de México: maternidad, independencia económica, disputas legales y violencias que atraviesan a muchas mujeres. En este momento de su carrera, canta y lo cuenta: las mujeres que crían y sostienen no retroceden, aun frente a presiones o intentos de disciplinamiento.



Lo que sigue para Cazzu
La gira de Cazzu continuará por Chile, Perú y Colombia. En Argentina, ya suma cuatro Movistar Arena completos y una quinta fecha anunciada para febrero. Además, fue seleccionada como artista EQUAL Global de Spotify, reconocimiento a su rol dentro de la música latina.
ML






