NARCOESCÁNDALO EN EL CHACO: AGENTE DE POLICÍA PRÓFUGO TRAS ALLANAMIENTOS

Las fuerzas de seguridad del Chaco están bajo la lupa debido a un nuevo caso de narcocriminalidad que ha sacudido a la provincia. Recientemente, se han revelado varios casos de alto perfil, como los relacionados con el «clan Sosa» en Sáenz Peña, que involucran incluso a exjueces federales. En este contexto, el último escándalo emergió tras una serie de allanamientos sorpresivos realizados el jueves en Resistencia, que resultaron en la detención de cuatro personas, tres de ellos gendarmes, y la incautación de una considerable cantidad de droga y dinero.

El operativo, llevado a cabo por Gendarmería Nacional, consistió en 12 allanamientos simultáneos en Villa del Oeste. Esta acción formó parte de una extensa investigación destinada a desbaratar la banda liderada por un presunto capo narco conocido como «Huguito». La investigación está bajo la jurisdicción del Juzgado Federal 1, encabezado por la jueza Zunilda Niremperger, y cuenta con la intervención de la Fiscalía Federal de Patricio Sabadini. La Unidad de Investigaciones de Gendarmería de Resistencia desempeñó un papel crucial en la ejecución del operativo.

Durante los allanamientos, las fuerzas de seguridad lograron secuestrar 2.800 kilogramos de cocaína, 4.500 dosis de estupefacientes listos para la venta, 24 millones de pesos, 4.000 dólares, dos armas de fuego con numeración limada, cinco vehículos de alta gama, seis motocicletas y documentos relevantes para la causa. Entre los detenidos se encuentra el supuesto cabecilla de la banda, identificado por sus iniciales H.E.M., y tres gendarmes. Uno de estos gendarmes formaba parte del grupo encargado de la investigación.

Lo que se supo en las últimas horas es que hay un prófugo, quien también es miembro de una fuerza de seguridad: un agente de la Policía del Chaco. Este agente es ahora objeto de una orden de captura y su paradero es desconocido. La situación ha generado una gran preocupación y expectativa en la comunidad, mientras las autoridades intensifican sus esfuerzos para localizar al prófugo y continuar desmantelando la organización criminal. La conexión de oficiales de seguridad con actividades delictivas de este calibre subraya la necesidad de una revisión profunda y continua de las fuerzas de seguridad para garantizar su integridad y efectividad en la lucha contra el narcotráfico.