SENADO: VICTORIA VILLARRUEL INICIA PLAN PARA ELIMINAR «ÑOQUIS»

La vicepresidenta del Senado, Victoria Villarruel, ha lanzado una resolución administrativa para reempadronar a los empleados de la planta permanente del Senado, con el objetivo de reinstaurar el control de presentismo y cumplimiento de la jornada laboral mediante huella dactilar. Este programa, apodado «el busca ñoquis» por sus cercanos, comenzará el próximo lunes y se extenderá hasta el 19 de julio, contando con el apoyo de la Asociación del Personal Legislativo (APL), principal gremio del Congreso conducido por Norberto Di Próspero.

Según la resolución firmada por la secretaria Administrativa, María Laura Izzo, durante este período, los empleados deberán actualizar sus datos personales a través de un formulario. La medida afecta a todos los trabajadores comprendidos en el estatuto del empleado legislativo, ley 24.600, con la excepción de aquellos en planta transitoria que trabajan en los despachos de los senadores. El control de presentismo por datos biométricos ya se utiliza en la Cámara de Diputados y se había implementado en el Senado en 2018, bajo la gestión de Gabriela Michetti, pero fue suspendido en 2020 por la pandemia de COVID-19 y las medidas de aislamiento obligatorio impuestas por el gobierno de Alberto Fernández.

A pesar de que las restricciones sanitarias finalizaron oficialmente en mayo del año pasado, el control de ingreso y presentismo no se reactivó, dejando los molinetes de acceso al Palacio Legislativo y al edificio anexo del Senado fuera de uso. Además, la base de datos de las huellas dactilares, registrada inicialmente durante la gestión de Michetti, desapareció casi por completo. Actualmente, el Senado tiene una planta cercana a los 4700 empleados entre permanentes y transitorios. Aunque hubo intentos de reducir esta cifra, especialmente durante las gestiones de Michetti y Cristina Kirchner, los esfuerzos lograron reducir la planta de empleados de manera diversa.

El control del presentismo es solo una parte del plan de Villarruel. Desde que Izzo asumió la Secretaría Administrativa, se han descubierto casos de empleados que cobran sueldos sin asistir al trabajo, como una empleada de la orquesta que residía en Miami, o una persona con tobillera electrónica cumpliendo prisión domiciliaria. También se encontró que los hijos de una exempleada cobraron su retiro voluntario durante seis meses después de su muerte. En paralelo, Villarruel creó una comisión especial para realizar un «análisis integral de los recursos humanos» y revisar los nombramientos de los últimos dos años de Cristina Kirchner al frente de la Cámara alta, una medida resistida por los gremios que consideran que viola el estatuto de los empleados del Congreso, que garantiza estabilidad una vez superado el año de antigüedad.

Estas acciones buscan no solo eliminar irregularidades, sino también optimizar el funcionamiento del Senado y asegurar que los recursos humanos sean utilizados de manera eficiente y transparente, enfrentando las resistencias y desafíos que se presentan en el proceso.