La crecida del Río Paraná junto con las últimas inclemencias climáticas, comenzaron a causar el desprendimiento de la costa en el barrio San Pedro Pescador, las cuales se hunden y dejan en grave peligro a las casas lindantes.

En este contexto, los vecinos del barrio pesquero intentan combatir el desbarranque con algunos medios rústicos, utilizando palos, arena, piedras y troncos, creando una especie de «pilares» que sostengan las tierras.

De esta manera, la erosión causada por el roce entre el agua y las tierras costeras, han puesto en peligro de hundimiento a algunos domicilios.

Los vecinos de la zona indicaron que ya solicitaron las atenciones correspondientes al municipio de Colonia Benítez. Entre las peticiones, solicitaron materiales o la construcción de una defensa fluvial sobre los lugares más afectados, como así también un terreno estable para asentarse.

En cuanto a esto último, los lugareños expresaron que desearían moverse de los terrenos actuales a uno en donde no corran peligro de que «en una madrugada de tormentas, la casa se vaya al río».